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Para empezar sólo vas a necesitar:  Papel de lija fina y gruesa. Cinta de pintor. Si hay pintura vieja, retirarla con una lija o removedor de pintura. Pero, al igual que la ventana, vas a necesitar materiales básicos como lija (gruesa y fina), imprimación puertas y ventanas, la clave para que la pintura se adhiera bien es retirar lo viejo o el óxido con una lija gruesa para, luego, alisar con una lija fina.

balde para hacer la mezcla Moldes (uno más chico y otro más grande que entre uno adentro del otro) Lija Paso #5: Dales el Toque Final a tus Macetas de Cemento Cuando ya esté seca, lijala para darle el acabado

de papel higiénico color marrón medio grisáceo, hecho por el mismísimo Satanás, más abrasivo que una lija

mediciones Clavos, tornillos o pegamento para madera Un serrucho o cortadora eléctrica de madera Una lija convencional o lijadora eléctrica Barniz para madera Sellador para madera Pintura del color que gustes Luego,lijá la superficie para eliminar la porosidad y las astillas.

dos recipientes de plástico (uno de ellos debe entrar en el otro), cemento, agua, aceite lubricante, lija Paso 7: Lijá todas las imperfecciones para que quede completamente prolijo.

Elegí la pintura adecuada para tu espacio, y tené a mano lija, pinceles y rodillos.  Antes que nada, pegale una buena lijada a la pared para generar una superficie bien porosa sobre la que

Así que agarrá la lija correspondiente a la superficie a preparar (existen grosores específicos para

Después, retirá con cuidado el revestimiento o la pintura descascarada utilizando una espátula o lija

Papel de lija para suavizar zonas ásperas o dejarlas brillantes. Trapos de limpieza. Dejan una capa de acabado delgada y perfectamente lisa.

de tu pared con humedad Antes de avanzar, debemos chequear que la superficie que vamos a pintar esté lisa remover todo lo que se haya arruinado por la humedad, nivelar con enduido plástico y luego utilizar una lija

Si aún así no lográs sacarla, podés probar con químicos más abrasivos, ¡o incluso con una lija de agua

Lijá la madera para quitar el aserrín. Limpiá la superficie con un trapo seco. Pasá lana de acero por la superficie para lijar suavemente. Aplicá dos capas más de aceite.